Sus trabajos iniciales de los años ochenta -con madera-, son inducidos por principios geométricos, persiguiendo el acuerdo de materia, forma y contenido, en volúmenes esenciales de formatos pequeños y medianos. Un ánimo racional preside sus trabajos que morigeran sus impulsos intuitivos al respetar las trazas originarias del tronco, con mínimos desbastes, que remiten a elementos de la naturaleza sometidos a abstracciones. Ha derivado al uso de metales, fundiendo aluminio, bronce y cobre, acoplados en maderas verticales, de acentos totémicos. También ha diseñado obras monumentales metálicas o,con materiales industrializados, en espacios públicos, posibles de ser miradas y recorridas por los ciudadanos, involucrándolos en diálogos estéticos.