Cien años de trayectoria en la plástica chilena de la obra pictórica de Ximena Cristi

  • Ennio Bucci Abalos
    Licenciado en Teoría e Historia del Arte y Estética
    Miembro de la AICA

Me pregunto qué recuerdos estará haciendo Ximena Cristi en la tranquilidad de su taller al recordar tanta vivencia que ha experimentado a través de la pintura, desde su ingreso a la Escuela de Bellas Artes en el año 1939, y cómo fue aprendiendo este oficio, siguiendo las lecciones de su maestro, Jorge Caballero.

Ximena Cristi perteneció a la Generación del ’40, estos jóvenes artistas profesaban una autentica veneración por el Parque Forestal y la Escuela de Bellas Artes.

La artista recuerda:

“Para la mayoría la escuela se convirtió en su segundo hogar, estaban metidos todo el día en los talleres, en la biblioteca, paseando por el parque o en elevadas conversaciones con sus profesores. Se vivía una autentica fraternidad y hermandad entre todos nosotros”.

Los verdaderos maestros de esta generación son Pablo Burchard, Jorge Caballero y Augusto Eguiluz; quienes impartían la cátedra de pintura y dejaron una huella en sus discípulos y alumnos. Jorge Caballero recibió el influjo de la pintura francesa y el expresionismo alemán. Siguió la orientación posimpresionista; dejándose llevar por la influencia del maestro de Aix Paul Cézanne; esa influencia sería trasmitida a sus alumnos.

Tuve la suerte de conocerla cuando con mi padre visitábamos su taller para ir familiarizándonos con su obra. Ella siempre nos recibía afable y cordial. Conversábamos de muchas cosas, y yo, atento a mi temprana edad, observaba sus trabajos con detención y escuchaba las conversaciones que tenía con mi padre. Con el tiempo, me fui compenetrando en su obra plástica, que me atraía por su composición sintética y colores intensos, elementos que han sido constantes en su trayectoria.

Entre los años 1949, fue becada por el gobierno italiano para perfeccionar sus estudios en ese país, en la “Accademia di Belle Arti di Roma”.

¿Cómo habrá sido para Ximena de impactante e impresionante, tomar contacto con Italia y su cultura? Estudiar arte ahí, impregnándose de su historia, poder conocer en vivo a los grandes maestros del Renacimiento, y a su vez, empaparse con las enseñanzas que le daban sus maestros en la Academia de Bellas Artes de Roma.

Aprovechando su estadía en Europa, visitó España y Francia, conoció a los maestros de ambos países, y aprendió de sus técnicas y oficio en la pintura. A su regreso a Chile, ejerció la docencia en la Escuela de Bellas Artes, tomando a su cargo la cátedra de pintura desde 1952 hasta 1982. 

De la obra plástica de Ximena Cristi, podemos decir que tiene influencias expresionistas, lo que apreciamos en las líneas de intensa fuerza que le da a sus pinturas, y en cómo ordena y desordena sus composiciones. Por otro lado, la influencia del fauvismo, transmitiendo un festivo y alegre colorido que se expresa en su paleta cromática de intensas tonalidades, donde predominan los rojos, verdes, amarillos, anaranjados, azules intensos y violáceos. La artista en su obra llega a una síntesis en cuanto al tratamiento de la línea y el color en el contexto global.

Fue una gran docente en la cátedra de pintura. Tomando el testimonio de uno de sus alumnos, Arturo Stange, quien estudió Licenciatura en Artes en la facultad:

“Era una profesora que se preocupaba de descubrir y de sacar a la luz el talento de sus alumnos, era cálida y acogedora. En sus clases se creaba un ambiente de gran fraternidad y armonía, donde se podía conversar e intercambiar ideas profundas sobre temas de arte, historia del arte, plástica y estética. Para mí fue importante su guía como profesora, me llevó a descubrir cómo al observar una composición plástica, se descubren ciertas cosas al azar, lo esencial de la pintura, y cómo al observar dicha composición se pueden dejar ciertas cosas de lado. En sus clases aprendí la importancia del color y la composición. Me llevó por un camino de poco tiempo en la pintura, a descubrir la figuración como un pretexto para llegar a la abstracción”.

¿Cuál es el aporte de la pintura de Ximena Cristi?

Ximena Cristi en sus pinturas, plantea el intimismo: nos invita a meditar y a reflexionar, cuando vemos alguno de sus cuadros.

La artista ha desarrollado muchas temáticas, como los interiores de jardines, autorretratos, paisajes, figuras de niños, naturalezas muertas, bodegones, frutas; todos realizados con síntesis y precisión en su trazo dibujístico.

Un aspecto interesante en su obra plástica es el boceto que realiza en cada una de ellas, plantea lo inacabado, deja que el espectador complete con su óptica lo representado en cada cuadro.

Su paleta matissiana es potente, llena de fuerza e intensidad. Surgen en ella, un cromatismo vivo de colores que se acercan al fauvismo, que de alguna manera expresa la alegría de vivir. Su pintura es muy matérica, saturando en intensidad la superficie de la tela.

En estos cien años de vida de Ximena Cristi, podemos constatar que estamos ante la presencia de una artista sólida y consagrada en su quehacer y trayectoria. No hay duda de su talento y maestría.

Es un honor para la plástica chilena contar con la presencia de una artista de la magnitud de Ximena Cristi, que ha entregado y aportado tanto al arte nacional. La felicitamos por sus cien años de vida.